Personas físicas, organizaciones locales y globales, gobierno en todos sus niveles y dependencias estatales, así como asociaciones y ONG’s requieren servicios legales cada vez más especializados, distintos a ese estereotipo del “abogado en juzgado” que nos presentaron centenares de series de televisión (y telenovelas), aun cuando los juicios en nuestro país no se celebran de esa forma.
“El Derecho que estudiaron nuestros padres no es el Derecho de hoy. Ser un abogado en el siglo XXI significa ser una persona que sea multidisciplinaria y especialista”, comenta Lic. Fátima Méndez Navarrete CEO de Afarc Servicios Integrales.
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